La londinense Pace Gallery acoge desde el 11 de febrero hasta el 27 de marzo de 2020 una exposición individual de nuevas obras del maestro de la luz y el espacio James Turrell. La muestra presenta tres nuevas obras de su serie Constellation.
Influenciado por la noción de la fenomenología en el arte pictórico, los primeros trabajos de Turrell se centraron en la dialéctica entre construir luz y pintar con ella, basándose en la experiencia sensorial del espacio, el color y la percepción. Estas interacciones se convirtieron en la base de la obra desarrollada más tarde por Turrell, que evolucionó a una investigación de la inmaterialidad de la luz misma.
Con estas nuevas piezas, Turrell continúa su exploración de posibilidades tecnológicas combinadas con prácticas sensoriales y colores degradados. Presentadas en cámaras específicas, las obras presentan formas elípticas y circulares con una superficie de vidrio esmerilado animada por una serie de luces LED técnicamente avanzadas, que se montan en una pared y se generan por programación de computadora. Los cambios de luz son sutiles e hipnóticos, un color se transforma en el siguiente. El programa se ejecuta en un bucle que es imperceptible para el espectador, lo que provoca una experiencia trascendental.
«Hasta cierto punto, para controlar la luz tengo que lograr una manera de formarla, así que uso la forma casi como el bastidor de un lienzo», afirma Turrell. «Cuando preparo las paredes, las hago tan perfectas que en realidad no les prestas atención. Esto es cierto para la arquitectura de la forma que uso: me interesa la forma del espacio y la forma del territorio, cómo habitamos conscientemente el espacio».
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