Durante la celebración de la feria de arte contemporáneo Art Basel Miami Beach 2019, los invitados de la firma de cosméticos de lujo La Prairie se reunieron en una playa privada frente al W Hotel para asistir a la presentación de la instalación Wave, del artista español Pablo Valbuena.
La obra de arte formada por varias columnas de aluminio enraizadas en la arena mostraba un movimiento de luz ascendente y descendente, siguiendo un patrón fluido que imitaba una ola. La experiencia visual se acrecentaba con el sonido del océano, a solo unos metros de distancia.
Según el propio artista, “Wave ilustra un volumen escultural que se desenvuelve a lo largo del tiempo – la forma de la luz, capturada en un movimiento perpetuo. Emplea materiales efímeros e intangibles – luz y sonido – y puede ser atravesado por el observador, sumergiéndolo en las formas creadas por las columnas de luz ondulantes. El trabajo crea una experiencia moldeable de escala: se desplaza entre el objeto y el entorno dependiendo de la posición del observador: desde dentro, fuera, o en un extremo de la instalación”.
Para poder emular el movimiento de las olas del mar, se diseñaron y fabricaron un total de 25 columnas de unos 4 metros de altura. Cada columna disponía de 4 caras con 80 LED/cara, y una temperatura de color de 4000 K. En total, 8.000 LEDs controlados punto a punto a través de DMX, dieron luz a este proyecto singular, que entusiasmó a los privilegiados invitados.
A la hora de desarrollar la instalación, Pedro Valbuena pidió ayuda a SAKMA, una ingeniería lumínica con base en Barcelona que a través del diseño, el desarrollo y la fabricación de soluciones a medida consigue la mejor solución para cada proyecto.
«Algunas de las particularidades que tuvimos que tener en cuenta fueron que las piezas resistieran un ambiente húmedo y marino; que gozaran de robustez y seguridad ya que la instalación invitaba a los espectadores a sumergirse completamente dentro de la obra; alta fiabilidad puesto que la exposición duraba solo dos días y no podía fallar; y facilidad de montaje porque solo se disponía de un día para ello. Y todo a 10.000 kilometros de distancia», nos explica Ángel Sanabra, Director General de Sakma.
El resultado se puede observar en este video.