Brut Deluxe, un estudio creativo con sede en Madrid y en Munich, ha sido el encargado de adornar el paisaje navideño urbano de Berlín que esta temporada se ha materializado en tres instalaciones de luz en la avenida Kurfürstendamm, una de las más famosas de la ciudad.
La primera instalación es una enorme cúpula luminiscente con un diámetro de 7,5 metros en Joachimstaler Platz que se eleva por encima de los transeúntes y los envuelve como en un paraguas.
La segunda se compone de cinco cubos brillantes en tres dimensiones en el cruce de Uhlandstraße, flotando por encima de los transeúntes como regalos gigantescos envueltos en luz.
La tercera es una acumulación de 50 arbustos de luz en un paisaje artificial, en la intersección de Knesebeckstrasse. Lo que los tres diseños tienen en común es su efecto atmosférico: en vez de adornos típicos que representan la Navidad a través de objetos o símbolos, cada uno crea un espacio para que los compradores y los peatones se puedan introducir de lleno en la experiencia.
Estos tres ambientes que se han creado en la ciudad y que se pueden contemplar hasta el 6 de enero de 2014 se han convertido en un lugar de retiro que envuelve al espectador y lo introduce en un laberinto de luz entrelazado.
Nos imaginamos este espacio artificial en la ciudad como un lugar imaginario, un bosque encantado donde retirarse sin autorización. La atmósfera que rodea el espectador se produce sólo con la luz que altera su densidad y la intensidad constante a través del movimiento del visitante y el cambio de perspectiva. Los paisajes realizados con la luz se inspiran en imágenes y situaciones que asociamos con la Navidad grabados en nuestra memoria abstracta.
Fotografía: Miguel de Guzman
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