La región de Lazio está de enhorabuena. El renacer del espectáculo natural de las Cuevas de Collepardo es ya una realidad gracias a su nuevo tratamiento lumínico. El proyecto, firmado por la diseñadora de iluminación Chiara Carucci, renueva la experiencia de explorar y conocer sus recursos naturales respetando la herencia recibida.
Con el principal objetivo de proteger y realzar la belleza del patrimonio, la diseñadora italiana se ha sumergido una intensa labor de estudios previos y asesoramiento espeleológico. Un trabajo de documentación que ha sido fundamental para comprender la extrema complejidad de este frágil contexto.
El nuevo sistema lumínico permite a los visitantes moverse con seguridad al tiempo que respeta la biodiversidad del entorno subterráneo. El proyecto minimiza la perturbación de los actuales habitantes de la cueva -los murciélagos- y evita el crecimiento inadecuado de bacterias, musgos y otras plantas que florecen como consecuencia de la luz artificial.
Distancia, baja intensidad y limitación de tiempo de exposición han sido los parámetros principales de un diseño que utiliza la luz como narrativa para describir las cinco etapas de la expedición. La iluminación destaca las características, valores y fenómenos naturales más significativos y evocadores de un espacio deliberadamente oscuro, casi místico, que convierte a los visitantes en auténticos exploradores.
La intensidad lumínica se adapta a los niveles visuales y a la cantidad de luz natural en un recorrido que activa las distintas escenas al paso de los visitantes. 111 luminarias señalizan un camino al que se añaden 89 unidades de luz ambiental de 160 lúmenes con valores de atenuación de hasta el 50%.
Con el fin de favorecer la convivencia con los quirópteros y aumentar el confort visual de los visitantes, Chiara Carucci ha llevado a cabo una cuidadosa distribución y direccionamiento de los haces de luz. Las temperaturas de color elegidas se mimetizan con las tonalidades superficiales de una cueva cuyo ambiente agresivo la ha llevado a utilizar materiales libres de corrosión y conectores extra protegidos.
El respeto por el entorno ha sido de tal magnitud que incluso las obras de adecuación se planificaron en base a las fases fenológicas del quiróptero. Además, la intervención se sirve de elementos preexistentes como los pasamanos o áreas ya perturbadas en trabajos anteriores para la instalación de las nuevas luminarias.
Confort visual, veracidad y tridimensionalidad resultado de un proyecto que utiliza la oscuridad como herramienta de diseño. Un proyecto lumínico que más allá de proteger la biodiversidad, inspira al espectador a observar la belleza intrínseca de una cueva que nos invita a amar la naturaleza.
Chiara Carucci: diseñadora de iluminación con pasión ilimitada por la profesión. Desde al año 2004 ha trabajado como diseñadora de iluminación independiente en el ámbito público y planes maestros. Entre otras actividades divulgativas, actualmente trabaja en Okidoki Arkitekter y ejerce de Coordinadora Principal del IALD en Noruega.
Cliente: LazioCrea spa + Lazio Region
Diseño de Iluminación: Okidoki Arkitekter